Mantenimiento Predictivo
¿Qué es?
El mantenimiento predictivo es el conjunto de acciones que se ejecutan sobre los activos para detectar o corregir fallas en forma temprana, con el fin de evitar que estas fallas puedan ocasionar pérdidas en los procesos o daños severos sobre las máquinas monitoreadas.
Para realizar mantenimiento predictivo, es necesario contar con un monitoreo constante de los activos y con un sistema capaz de interpretar la enorme cantidad de datos generados. A partir de sus algoritmos de inteligencia artificial (IA), e inscribiéndose en el paradigma de Industria 4.0, la plataforma Terative es capaz de informar las variaciones que se producen en los patrones de funcionamiento de las distintas máquinas, y establecer las posibles causas de esas variaciones.
Diferencias con otras estrategias de mantenimiento
Las tareas de mantenimiento predictivo (o las de mantenimiento basado en la condición), implican constatar si algo está fallando o está próximo a fallar a partir de las condiciones de funcionamiento.
A diferencia de esta estrategia, las tareas de mantenimiento preventivo normalmente implican restaurar activos o reemplazar componentes a intervalos fijos. Esto significa que muchas veces se reemplazan elementos que podrían haber sido utilizados por un período más prolongado, incrementando de esta forma los costos asociados a consumibles y a mano de obra.
El mantenimiento correctivo significa reparar activos o sus componentes cuando se descubre que se ha producido una falla severa a partir de sus consecuencias de alto costo (ruptura de los equipos, detención de los procesos, o accidentes).
Ventajas del mantenimiento predictivo
Dentro de las ventajas del mantenimiento predictivo y el mantenimiento basado en la condición, encontramos las siguientes:
- Reduce el costo de las fallas de activos
- Minimiza el tiempo dedicado al mantenimiento.
- Minimiza los costos de horas extras al programar las actividades con base en información del estado de los activos.
- Reduce el reemplazo de piezas funcionales.
- Minimiza el requisito de piezas de repuesto de emergencia.
- Optimiza los intervalos de mantenimiento
- Reduce las posibilidades de daños colaterales al sistema.
Las ventajas del mantenimiento predictivo sobre el mantenimiento correctivo se observa también en la curva D-I-P-F.
En esta curva, se grafican las evidencias de las fallas de un sistema.Tenemos así el punto “D” en que se termina de diseñar el activo, y el punto “I” que corresponde al momento en el cuál el activo queda instalado en la planta. A partir de ese momento, el activo queda en funcionamiento y es la zona en la cuál se realiza mantenimiento PREDICTIVO.
Durante esa etapa, la evidencia de fallas la pueden indicar factores como aumento en las vibraciones y temperatura del activo, degradación del estado del aceite, incremento en el consumo de corriente, aumento del nivel de presión sonora o modificación, no perceptible por el oído humano, de su espectro de frecuencias. Las rutinas periódicas o en tiempo real permiten detectar tempranamente las fallas ocultas.
Si no se monitorea el activo en esta etapa, ingresamos en la zona de mantenimiento CORRECTIVO. Las fallas ocultas pueden deteriorar el funcionamiento en el que se detecta una Falla Potencial, indicada por el punto “P”. Las evidencias del deterioro son ruido audible, aumento notable de la temperatura, y aparición de olor, llevando a fallas de subsistemas o la falla del sistema completo, en el punto “F”.